proyectos | Viabizzuno progettiamo la luce

este sugestivo edificio que se recorta en el paisaje incontaminado es un centro de investigaciones con otra construcción anexa que sirve como alojamiento temporal de los investigadores. está situado en la isla de sao miguel, portugal. el centro de investigaciones es el mayor de los dos edificios, y se compone de tres alas que incluyen un patio, al que asoman todas las habitaciones. el patio representa un espacio intermedio entre el exterior y el interior, un punto de paso y de descubrimiento de todas las zonas internas del corazón del edificio. el patio se hace espacio de reunión, de meditación, de pausa y de comunicación entre el interior y el exterior: un espacio emotivo y arquitectónico en que la luz natural dialoga en sintonía con los materiales de la construcción. el edificio ha sido concebido también como escultura, como bloque de materia en bruto que presenta intencionadamente unos cortes en su interior con el objetivo de capturar la luz y las sugestiones de la laguna. la relación con la luz natural se hace matérica y sugestiva, el cuerpo construido se modula en el espacio conforme al ritmo alternado de la luz natural y la luz artificial. el edificio que sirve como alojamiento para los investigadores tiene una forma más simple, con planta cuadrada y techo en pendiente. el espacio se subdivide en cuatro unidades y en cada una las fachadas se recortan las entradas en madera que permiten la penetración de la luz y el acceso a cada una de las unidades residenciales. las cuatro zonas tienen techos a distintas alturas según la orientación de cada cuerpo con respecto al sol. el proyecto luminotécnico de toda la estructura juega con la relación entre luz natural y luz artificial: las bacchetta magica y los profilo c1 utilizados en el interior crean un trayecto de luz artificial que se articula en las superficies para formar un continuum ideal con los rayos de sol que se filtran en el interior a través de los cortes en las fachadas. el proyecto se propone evocar el paisaje arquitectónico de las azores, recurriendo a la forma y a los materiales arraigados en la memoria colectiva de la isla, que con el tiempo han pasado a ser la segunda naturaleza del lugar. por esta razón, los dos edificios presentan volúmenes simples y compactos, revestidos con la piedra basáltica del lugar.