proyectos | Viabizzuno progettiamo la luce

hampstead es uno de los suburbios con más espacio verde de londres: no es el típico escenario donde encontrar una casa moderna de fuerte arquitectura con elementos proyectuales de madera, piedra y cristal. la empresa constructora kearsley, que se ha revelado un promotor iluminado, encargó a pennington phillips el diseño de una casa capaz de aumentar al máximo el uso de la luz y del espacio y de confundirse, al mismo tiempo, con sus alrededores, en un modo armonioso. kearsley se entusiasmó con la idea de construir un tranquilo refugio a tan sólo unos minutos del centro de londres. los arquitectos deseaban sacar el mejor partido del potencial de la luz natural, recurriendo para ello a un abundante uso del cristal. para controlar la temperatura y la reverberación, la galería lleva una cubierta de lucernarios de madera de cedro que, además de proteger la intimidad de los dormitorios, dan un tono áureo y dorado a la luz del día que entra por las ventanas. en la zona de noche, la iluminación contrasta con la frialdad del cristal. las m1 medio extienden por el techo su luz difusa, mientras las m1 micro iluminan desde arriba acariciando las puertas de los muebles. las m4 empotradas iluminan desde abajo las paredes detrás de la bañera; el uso de sistemas de reostato permite controlar la temperatura de la luz, aumentándola hasta simular el efecto de una vela y crear una sensación de intimidad que a menudo se pierde en los espacios modernos. la forma larga y estrecha de la cocina se ilumina mediante una larga ranura de cristal (5,5 metros) que inunda de luz la superficie de trabajo y mantiene una sensación de intimidad, mientras las paredes de cristal en cada uno de los extremos crean la ilusión de encontrarse en el exterior. los perfiles c1 empotrados y los m1 micro a 90 grados que iluminan desde arriba se cruzan sobre el techo y crean juegos de luces contrapuestos a las fuertes líneas arquitectónicas del interior. pennington phillips han creado una entrada de doble altura envuelta en la luz natural gracias al uso de dos paredes acristaladas. una chimenea escultórica de cemento negro se levanta desde el suelo hasta el techo; su aspecto dominante se suaviza con un voladizo che hace de estante. un entrepiso fluctua sin esfuerzo a la altura de la mesa de comedor ofreciendo espacio para una tranquila contemplación. dos m6 iluminan desde arriba, dando luz tanto a la arquitectura como al arte. abajo, en la pared, las m1 micro a 45 grados y las m4 de piso se combinan con la triple luz montada en las paredes, con un efecto tenue y difuso. la danza de las llamas añade una seductora dimensión adicional a la iluminación.