proyectos | Viabizzuno progettiamo la luce

un proyecto extraordinariamente complejo, un cliente muy exigente, muy pendiente de los detalles y orientado hacia el mundo de la moda en continuo fermento: de ahí arranca el impulso de transformación de un edificio histórico típico de la periferia de brescia que, precisamente por esta condición suya, requería una reubicación espacial clásica en el tejido urbano y al mismo tiempo una revolución estilística que le permitiera destacar adecuándose a su nueva identidad comercial y a los cambios del tercer milenio. salvaguardado uno de los componentes más característicos del edificio, un espléndido establo con una doble fila de columnas y bóveda de crucería, el proyecto dibuja un espacio destinado a sala de exposición introduciéndolo en el volumen del conjunto, aumentando la altura del foyer de entrada y así creando una visión vertical y una integración visual dirigida al cielo y, simultáneamente, con una enorme proyección abierta hacia el jardín, y dilata su espacio hasta convertir el exterior en parte integrante y fundamental del interior. el edificio se articula en tres niveles, en los que la planta baja y el primer piso, básicamente destinados a la venta, están conectados por medio de una imponente escalinata autoportante que parece flotar sobre el fondo de la vidriera que mira al jardín. el espacio interior es un envoltorio neutro y abierto que da realce al sofisticado refinamiento de los productos y aparece connotado por piezas de marcada personalidad que ocupan el lugar de los elementos clásicos vinculados al mero trabajo cotidiano. el tono neutro de una piedra egipcia de tonalidades crema extraordinariamente compacta, la agradable calidez de la madera de encina vaporizada y decapada, y las grandes losas de obra incierta recuperadas por la memoria popular reinterpretan el concepto de la misma y confieren tanto al exterior como al interior un mismo sabor de memoria histórica. paredes muy sólidas de pasta de cemento y antiguos enlucidos fresados agregan capas de materia cromática que le transmiten al contexto una pátina antigua absolutamente contemporánea y contrastan con elementos decorativos de espíritu nómada perfilados para ser reubicados y dar versatilidad al conjunto del espacio. en el primer piso, los colores, de manera intencionada, no cambian sino que acogen materiales diferentes que dotan al espacio de un insólito aire doméstico. en este lugar destaca y suscita estupor la presencia de un enorme volumen que, desde lo alto, se articula en gradaciones de color cuyo origen no se capta, pues dicho volumen refleja, atrapa y plasma la luz generando un efecto arrebatadoramente fascinante: se trata de “la librería” con su superficie tridimensional revestida de polvo de titanio líquido. finalmente, se ha concedido una extraordinaria importancia a la gestión y ambientación de los escenarios a través de la domótica y con un esmerado proyecto de luz, para garantizar el control puntiforme de la iluminación interior y exterior. además, la realización de escenarios siempre nuevos y siempre repetibles ha dado lugar a un ámbito dinámico independiente de las variaciones luminosas naturales.