proyectos | Viabizzuno progettiamo la luce

la proyección de las bodegas cusumano es un recorrido iniciado en 2002, dos años antes de la puesta de la primera piedra, un recorrido difícil que ha vivido una confrontación continua donde tecnología e imagen se contienden constantemente una difícil supremacía. un proyecto del estudio ruffino associati, que ha sido desarrollado a directo contacto con el cliente, con el fin de conseguir realizar un proyecto comparable a un traje a medida, con las capacidades, las competencias y el estro del sastre-arquitecto. ha sido realizado un espacio técnico, obtenido gracias al soporte del enólogo mario ronco y de los hermanos cusumano, alberto y diego, con visitas a varias bodegas, en italia y en el mundo, con jornadas enteras transcurridas en la ya preexistente bodega cusumano para localizar flujos y exigencias, con largos encuentros con las empresas proveedoras de toda la ya fundamental tecnología, con el fin de entender el uso, las funciones y los ciclos de un complejo recorrido que sale de la tierra para llegar al paladar. después fue posible crear una rara sintonía, que ha unido en múltiples ocasiones el estudio ruffino associati y cusumano: desde la proyección del alcantarillado hasta la elección de los cubiertos, desde la proyección del stand del vinitaly a los almacenes rurales, hasta llegar a la bodega de partinico y a la de ficuzza. la cusumano, en efecto, en la persona de diego cusumano, jefe del sector marketing y comercial de la empresa, con su elección valiente para ese contexto, ha convertido a la comunicación y la imagen en una base fundamental para hacer conocer la calidad de sus vinos. con mayor acercamiento a la comunicación que al mundo del vino, alejándose de la clásica imagen de bodega rural y de madera rústica, se ha elegido tomar un recorrido ligado al color, a la búsqueda de los materiales y al detalle. el primer plástico producido fue un elemento abstracto, compuesto por una mesa de roble, una barra de acero inoxidable y un trozo de piel que, dispuestos aparentemente de manera casual, señalaban ya la forma de lo que más tarde se convertiría en el proyecto final. en este primer estudio el roble representaba la tradición, el paso del vino en la madera, con la atribución de una contribución organoléptica olfativa única, el acero era sinónimo de la innovación que ha marcado el cambio del vino en sicilia porque, combinado con el control de la temperatura, ha permitido también en esta tierra, realizar vinos de calidad allí donde la tradición deseaba sólo vinos de corte o del montón, mientras la piel representaba la parte humana, la esencia fundamental, la voluntad de las personas y su calor como componentes fundamentales para que todo esto pueda convertirse en realidad. tal y como hemos anticipado, los dos años de proyección fueron un recorrido de formación recíproca, finalizados a la investigación y por lo tanto a la creación de lo que hoy es un verdadero y propio ‘estilo cusumano', perfecta fusión de las voluntades recíprocas del proyectista y del cliete. un minimalismo mediterráneo, que de mínimo tiene poco pero de chillado no tiene nada, que, como la cocina, está compuesto por alimentos simples pero combinados en una fantasía única, donde los aromas infinitos no pierden su unicidad, donde lo dulce con lo salado y lo amargo con lo dulce son los protagonistas. un minimalismo mediterráneo hecho de materia, piedras naturales, tipos arquitectónicos fruto de milenios de distintas dominaciones en sicilia, cada una de las cuales ha sabido dejar algún rastro de color, elemento del paisaje mediterráneo, fundido con la luz y las sombras. de este último elemento nace la elección de proyectar con Viabizzuno, la empresa que mejor expresa el concepto de luz adherente al proyecto, no hecho sólo de cuerpos de iluminación y lámparas sino sobretodo de la esencia de la luz, donde la sombra tiene la misma dignidad que la luz y la fusión de los tres elementos, luz, sombra y arquitectura son capaces de caracterizar el espacio y exaltar su valor. el proyecto se compone fundamentalmente de tres elementos: el primero es un antiguo “baglio” del mil ochocientos, emergido de los cimientos de un sito de probable origen árabe del 1100; el segundo es la bodega de nueva instalación y el tercero es el jardín con el muro que constituyen el “trait-d'union” de los varios elementos y de los varios espacios. el baglio, que es una típica instalación siciliana consistente en una construcción cerrada en el exterior con un amplio patio interno, está compuesto por un recinto fortificado, una torre de defensa y de control, una cuadra y un pozo de agua. esperando a que se completara el proyecto, por lo que se refiere a la parte técnica, se ha iniciado la intervención de consolidación y restablecimiento de este primer elemento. lo que un tiempo fue el establo se ha transformado en espacio de representación con una barra de bar, salón y una biblioteca con publicaciones de autores sicilianos o libros sobre sicilia y, si es necesario, área de degustación. la torre acoge una moderna cocina, un comedor y una sala de meditación. el lado largo del fabricado, que aloja los locales para el afinamiento y el envejecimiento, está orientado según la directriz este-oeste, para utilizar mejor la luz del sol y los vientos locales, con el fin de poder controlar la climatización de estos ambientes de la manera más natural y económica posible a través de chimeneas de viento. en la cabeza de este cuerpo de sesenta metros de longitud y veinte de anchura, a la profundidad de seis metros por debajo del nivel del suelo, encuentra su hábitat natural en un frondoso jardín, cuya pared mayor está constantemente mojada por una caída de agua que crea un microclima fresco y húmedo ideal para las carricas que, aspirando el aire humidificado y refrescado contribuye al control climático interno. la estructura del edificio es de tipo mixto, constituida por un sistema constructivo enrejado, travesaños-pilares de hormigón y cemento armado, tamponamiento perimetral realizado con bloques de ladrillos para lograr un buen control térmico. la cobertura de doble falda, inspirada en los típicos almacenes de la zona pero realizada con cercas de acero y paneles de madera, elementos originarios inspiradores del proyecto, crea una cámara de aire ventilada, garantizando el justo aislamiento térmico. en las oficinas, sin embargo, la cobertura plana otorga a la manufactura una forma cúbica de derivación típicamente árabe, con el fin de acercar en el mismo contexto dos elementos típicos de la arquitectura de sicilia occidental, como la árabe y otra fruto de las numerosas influencias de todos los dominadores continentales pasados en los siglos por la capital siciliana, bagaje valioso para la memoria histórica de la isla. unión y cesura de estas diferentes arquitecturas es el jardín con su muro que, atravesando todo el edificio según la directriz norte-sur, constituye también frontera de diferentes funciones logísticas. el jardín histórico del antiguo baglio, hecho de cítricos, higos chumbos, aceitunas y de una alta palmera que indica la presencia del pozo en la semiótica árabe, ha encontrado natural prosecución en el bosque de cítricos que parece sobresalir naturalmente de la hendidura abierta en el recinto del baglio como conexión a la bodega, continuando con otros cítricos unidos a las palmeras y muchas otras esencias, todas ellas típicas del mediterráneo. la realización de esta bodega, que nace de la elección de tomar el camino de la innovación y de la adecuación para mantener una posición líder en el mercado enológico de la familia cusumano, ha sido posible gracias a las largas miras del personaje prinicpal: francesco cusumano quien ha tenido la valentía de confiar en sus hijos alberto y diego para incrementar el abanico productivo y, por lo tanto, aventurarse en el recorrido del vino embotellado. la familia cusumano, en efecto, ocupada desde años en la venta de vino a granel y mosto concentrado, con la nueva generación decide diversificar la actividad e iniciar un recorrido de producción directa, controlando el producto ya desde el campo, para hacer del vino de calidad una marca fuerte. La adquisición de una serie de viñedos y su replantación marcan el cambio empresarial con alberto cusumano al frente de la línea productiva y diego como responsable de las elecciones empresariales y comerciales. es verdad que es difícil producir un buen vino pero aún es más difícil venderlo. el recorrido difícil, iniciado en un territorio caracterizado por vino de corte, es la apuesta que la familia cusumano ha sabido ganar empezando sin prisa pero sin pausa, recogiendo premios y pedidos que prueban su sabia elección.